Thursday, October 05, 2006

Cronica de una historia muy platicada pero no escrita [Parte I]

El 21 de agosto era un día que esperaba con ansia, creía que era el día en que iba a poder descansa o 3 horas en el día…pobre ilusa. Fue un día triste y la verdad me siento más cansada que antes les informo que me he convertido en una kindergarten mother.

Si el primer día de clases de mi hijo es un día que no olvidare. Nunca lo había dejado solo con gente extraña desde su nacimiento. Entiendan esto: si trabaje por espacio de 5 meses pero el se quedaba en casa de mi tía Chelina, digo no eran extraños era gente a la que el ve cada fin de semana; son su familia y además era más chiquito.
La verdad con otra gente que no fuera familia, nunca se había quedado y aunque ya iba preparado psicológicamente para quedarse en el kinder le gano el sentimiento. Pero empecemos la historia de manera correcta, les daré la antesala.

El domingo anterior fue la fiesta de mi hijo y yo estuve terca desde no se cuando que esa semana iba a ser increíble para mi hijo y para mí: jamás en la vida iba a volver a ser libre de la escuela. Bueno exagere al menos en los siguientes 10 u 11 años por obligación.
El caso es que yo quería que mi hijo tuviera una semana súper divertida para que iniciara con ánimos de ir al kinder, y así fue. El fin de semana antes de entrar al kinder lo bombardeamos con la idea de que el kinder, vas a tener amigos, en fin le vendimos la idea y el ¡FELIZ! Estamos hablando de un niño que en su vida había jugado solamente con 5 niños de su edad (y creo que son muchos) así que ir al kinder significaba amigos de su edad, compañeritos de juego: alguien que no fuera su familia y que quisiera jugar con el.

Lunes por la mañana se levanta y todo iba bien casi lloro al verlo en su uniforme blanco con sus zapatos nuevos, se oye de repente al unísono el grito de sus padres: ¡NO TE SIENTES! Repito: uniforme blanco, el angelito se iba a sentar en la escalera a esperarnos para bajar : Salimos rumbo al kinder, bajamos la camioneta se despide se su papá y de su abuelita (si la colada unos cuates) nos formamos para poder entrar al kinder suena el celular: su tía Diablo habla conmigo colgamos, don divo no quiere hablar.
Le digo al niño:
-Papi déjame tomarte una foto
-No
-Ándale Paco, con tu uniforme nuevo
-¡No!
-Para enseñársela a Pepe y Andrés-el chantaje funcionara pensé
-¡NO!

Así que opte por no hacerlo gritar y suena la campana hora de despedirnos para mi sorpresa dejaron entrar a los papás hasta los salones para que los hijos se acostumbraran, bla, bla, bla, GRAN ERROR. Llegamos al salón y que se da cuenta de que solo el se iba a quedar y yo no, ve a su alrededor más niños llorando y acto seguido la imagen que rompió mi corazón: mi único hijo llorando por que lo iba a dejar. Se que suena muuuuuuuy dramático pero eh! Es mi bebé aunque el lo niegue.
En fin que me abraza y no me quiere soltar e hice lo más cruel (al meno en ese momento a mi así me pareció) que veo que la maestra abre la puerta y que corro y lo dejo sin mirar atrás. Salgo del kinder y le digo al papá:
-Lloro
-¿¡Lloro!?
Silencio en la camioneta. Para no hacer larga la historia los primero 3 días lloro, para el 4 me dijo adiós por la ventana y espero a que me fuera, para el viernes ni me pelo.

Y esa es la historia de la primera semana de clases de mi hijo y mi primer semana de clases como madre del kindergardeano. No olviden sintonizar la misma dirección, a la misma hora en el mismo blog para saber por que el niño falto a la segunda semana de clases y se tomo de vacaciones 1 semana y media.

Inicia la el cambio: esclavo a la cámara de transformación para convertirme en KINDERGARDEN MOTHER!

No comments: